Recientemente, diferentes medios de comunicación se hacía eco de esta noticia: La puesta en marcha del primer hospital con IA del mundo.
Se trata del “Agent Hospital”, una clínica virtual, que puede atender a unos 3.000 pacientes al día gracias a su “equipo” formado por 14 médicos y 4 enfermeras generadas por inteligencia artificial. Los pacientes podrán “acudir” a un entorno simulado en el que la IA tratará de simular y predecir diferentes escenarios médicos como por ejemplo brotes que podrían acabar en pandemia. También podrá diagnosticar enfermedades y elaborar planes de tratamiento con una precisión del 93,06%.
Los creadores de esta clínica virtual creen que para la segunda mitad de año ya estará completamente operativa y a disposición de los pacientes virtuales.
La clínica virtual, creada por investigadores de la Universidad de Tsinghua en Pekín, nos acerca cada vez más a un escenario en el que médicos y enfermeras no son humanos, algo que no se esperaba ver tan pronto.
A pesar de que la IA promete transformar la atención sanitaria, por ahora, iniciativas como esta no están destinadas a reemplazar la atención médica tradicional con profesionales humanos.
Sin embargo, es una realidad que esta tecnología aplicada revolucionará la forma de diagnosticar enfermedades y no solo eso, sino que obligará a pensar en varias cuestiones éticas y prácticas que en cierta medida son extrapolables a otros sectores en todo lo referente a seguridad, salud en el trabajo y riesgos laborales. En especial si tenemos en cuenta que, según la consultora McKinsey, el 29,5% de las horas de los empleos actuales se reducirá a causa de la automatización.
¿Nos enfrentamos a nuevos y desconocidos riesgos en materia de seguridad y salud laboral?
La supervisión humana seguirá siendo vital para garantizar que la tecnología se use de manera segura y efectiva, pero ¿a qué nuevos riesgos nos enfrentamos en materia de salud laboral?
XXXXX Responsable de xxxxxx de Geseme nos aporta algo de luz sobre este tema respondiendo a algunas de las cuestiones que más inquietan en materia de PRL.
¿Cuáles crees que serán los principales riesgos laborales asociados con la inteligencia artificial que veremos en el futuro?
La automatización de tareas rutinarias es el cambio que vemos más relevante dado que cambiará la manera de realizar muchos trabajos. Este hecho en la práctica supone que muchos trabajadores deberán adquirir nuevas habilidades y adaptarse rápidamente a una realidad en constante evolución. A pesar de que los nuevos riesgos serán variados y afectarán a diferentes áreas, es en el área de riesgos psicosociales donde vemos un mayor recorrido y alcance de riesgos laborales.
¿Qué medidas preventivas podemos empezar a implementar desde ya las organizaciones para prevenir y mitigar los riesgos derivados de la cada vez mayor presencia de la IA en el entorno laboral?
Apostar por la formación y capacitar al personal empleado en el desarrollo de nuevas habilidades es un buen punto de partida. Además, de formación es importante que las empresas se adelantes y comuniquen en todo momento los cambios que se esperan en su entorno laboral. De este modo resultará mucho más sencillo aumentar la aceptación del personal empleado y prepararlos para que los cambios les afecten lo menos posible.
En cualquier caso, la realidad es que deberemos ir adaptando las políticas de prevención de riesgos laborales de manera constante según el impacto que tenga la inteligencia artificial en el entorno laboral. A medida que la tecnología avance deberemos adaptarnos, pero para llegar a tiempo es importante anticiparnos y abordar el reto que supone para las organizaciones el proteger al personal empleado en materia de seguridad y salud laboral.