La traducción literal sería algo así como «cápsulas para dormir», cada una cuestan alrededor de 10.000€ y están cada vez más presentes en muchas empresas como por ejemplo Samsung, Google, PricewaterhouseCoopers, Nike, el periódico Huffington Post’s o la heladera Ben & Jerry’s entre otras muchas compañías, para que sus empleados puedan dormir en el trabajo.
El objetivo no es otro que el de ofrecer más herramientas para hacer más agradable y productivo el tiempo que el empleado pasa en el trabajo y que puedan hacer una pausa en su trabajo para descansar.
Según un especialista en sueño del Hospital Brigham & Women’s en Boston e instructor en la Facultad de Medicina de Harvard, «hasta hace relativamente poco tiempo, el bienestar del sueño faltaba en la mayoría de los programas de bienestar: tendían a centrarse en la dieta, el peso, el ejercicio y el abandono del hábito de fumar. Eso ha sido desafortunado debido a la gran contribución que el sueño hace a la salud y el bienestar «.
Y es que la falta de horas de sueño o la falta de calidad del mismo se han convertido en uno de los principales riesgos para la salud. Para la Dra. Catalina Giraldo de Geseme, «La mejor forma de prevenir diferentes problemas de salud relacionados con la falta de vitalidad, cansancio, etc.. pasa, por supuesto por dormir una cantidad correcta de horas cada noche, entre siete a nueve horas. Pero si no es posible, una alternativa es hacer una pequeña siesta durante el día (unos 20 minutos debería ser suficiente) cuando nos sentimos cansados. Los beneficios son claros: la siesta ayuda a recuperar la concentración y también aumenta la productividad, contribuye a reducir la ansiedad y la depresión al minimizar los niveles de cortisol, que es una hormona que eleva el azúcar en la sangre. De ahí, que cada vez sean más las empresas que están reconociendo la importancia del sueño como un mecanismo extremadamente útil para un mejor desempeño laboral».
Las cifras respaldan la importancia del dormir y descansar. Según el ex presidente de la Academia Estadounidense de Medicina del Sueño. «El coste del insomnio en los EE. UU. Se estima en más de $ 100 mil millones como consecuencia de una menor productividad y mayor ausentismo y presentismo laboral».
En cualquier caso, la medida resulta fácil de implementar. Basta con destinar un área a zona de descanso y seguir algunos consejos que harán que ese descanso sea productivo:
- ¿Cuándo? Para la mayoría, los relojes de nuestro cuerpo interno comienzan a hacernos sentir somnolientos alrededor de la hora de la siesta, generalmente entre las 2:00 p.m. y las 3:00 p.m. Más tarde de esta hora no es recomendable dado que podría dificultar la capacidad de conciliar el sueño a la hora de acostarse.
- ¿Cuánto? El descanso debe ser breve. Una pequeña pausa de alrededor de 15- 20 minutos es suficiente en especial para evitar caer en una etapa profunda de sueño, que hará que nos levantemos peor. Es importante controlar la duración de la siesta para que ésta sea «energética».
- ¿Dónde? Encuentra la ubicación correcta. El espacio no tiene porqué ser necesariamente en la oficina, podemos descansar un poco en el coche, en un banco en un parque, en un despacho….
- ¿Cómo? Dado que el tiempo es limitado, para conseguir dormir con mayor facilidad recurre a aquello que hace que te relajes (escuchar música relajante, leer…) y que hace el descanso más cómodo (un cojín, una manta, antifaz para evitar la luz, etc…)