Seguridad y salud en el trabajo, medio ambiente y desarrollo sostenible están sumamente interrelacionados y la adopción de una de estas políticas requiere la implementación adecuada de la otra en cualquier organización.
La seguridad y salud en el trabajo (SST) y la prevención de lesiones y enfermedades se enmarca en uno de los principios en los que se basa el desarrollo sostenible. Un principio que tiene que ver con la necesidad de prestar atención a la salud y calidad de vida de las personas, a la prevención de riesgos y a la aplicación de la precaución cuando exista incertidumbre sobre los riesgos.
Por ello, proporcionar a los trabajadores un entorno de trabajo seguro y saludable, libre de peligros físicos, químicos, biológicos y radiológicos es clave para garantizar el desarrollo sostenible de cualquier organización.
Esto incluye seguir los estándares de seguridad de los trabajadores e implementar medidas preventivas y de protección que deben considerarse desde diferentes áreas o perspectivas:
Diseño de Equipos y Edificios
Desde el punto 0, cuando una empresa se encuentra ante la oportunidad de diseñar un espacio de trabajo, la prevención de riesgos y la mejora de la salud de los empleados debe ser tenida en cuenta. Si bien habitualmente la sostenibilidad de los edificios se ha preocupado más por los problemas ambientales, el concepto de sostenibilidad también debe incluir el velar por los recursos humanos de la organización. Para lograr una prevención sostenible, los encargados de diseñar los espacios de trabajo deben hacerlo conjuntamente con especialistas en PRL para aplicar diferentes medidas (ventilación, iluminación, etc..) que se sabe, tienen un impacto directo en la salud de los trabajadores.
Del mismo modo, con los equipos de trabajo, debe tenerse en cuenta desde la etapa de diseño los peligros potenciales que pueden estar asociados no solo con las operaciones o actividades de trabajo que se lleven a cabo sino también con el mantenimiento del equipo.
Esto supone
- Implementar controles de los equipos (sistemas de seguridad en las instalaciones, ventilación, salas de aislamiento acústico, protecciones de máquinas) etc…que permitan minimizar riesgos.
- Diseñar sistemas de trabajo seguro y medidas de control de procedimientos. Bajo este concepto entraría todo lo relacionado con
- Formación en prl
- Diseño ergonómico de los equipos
- Consideración de las limitaciones del cuerpo humano con respecto a cargas físicas turnos/rotaciones de trabajo
- Equipos de protección así como limitación de la exposición a zonas o trabajos que puedan ser más peligrosos y/o a contaminantes ambientales.
- Eliminación de todos los peligros hasta el punto máximo en que se pueda mediante la sustitución de productos químicos menos peligrosos, herramientas más seguras y cambios necesarios que deban implementarse – mejora continua- en los procesos de fabricación.
Gestión y Dirección: Empresa Saludable
La vigilancia de la seguridad y salud en el lugar de trabajo deben formar parte de la gestión de la organización y debe estar integrada en todos los niveles. Para tener una producción saludable de materiales, bienes y servicios hace falta una plantilla saludable.
No se trata solo de la gestión de la prevención de riesgos laborales. El concepto es mucho más amplio.
Según la OMS, una empresa saludable es aquella en la que los trabajadores y el personal directivo colaboran en la aplicación de un proceso de mejora continua para proteger y promover la salud, la seguridad y el bienestar de todos los trabajadores y la sostenibilidad del lugar de trabajo.
Se trata de un enfoque global que debe tener en cuenta diferentes áreas de actuación:
1).- La seguridad y salud en el entorno físico de trabajo y que afecta a todo lo relativo a la Política y organización empresarial
2).- Seguridad, Bienestar y Salud del entorno psicosocial
3).-Los recursos de salud en el espacio laboral: Medidas y Recursos destinados a promover la salud en el lugar de trabajo
4).-La participación de la empresa en la comunidad
Un plan de empresa saludable trae consigo la implementación de diferentes líneas de actuación específicas destinadas a mejorar la salud de los individuos que trabajan en una organización más allá de su jornada laboral. Por ejemplo, si en una empresa el 40% de los trabajadores fuma no basta con quedarse con ese dato sino con trabajar con objetivos y planes de acción específicos destinados a reducir el % de trabajadores fumadores.
Es por ello, que las inversiones en planes de empresa saludable suponen importantes beneficios sociales y económicos para la organización, pero también para la sociedad como extensión apoyando así el concepto de prevención sostenible.
Formación y Transmisión del Conocimiento Laboral
Una vida laboral cada vez más larga y cambios demográficos que se dan en buena parte del mundo y que suponen la incorporación de trabajadores jóvenes, da como resultado una mayor exposición a riesgos.
Por ello, es cada vez más importante adaptar la formación sabiendo que ésta no debe ser algo puntual, sino que debe garantizar que la prevención se mantenga a lo largo de la vida laboral. Esto en buena medida depende también de cómo se gestione la transmisión de conocimiento y cómo se gestione la diversidad generacional. Aprender un trabajo puede ser un proceso complejo. Por ello, el que diferentes generaciones puedan compartir conocimientos para garantizar el uso de prácticas de trabajo seguras y saludables es clave para crear una cultura de prevención de la salud y la seguridad que perdure a largo plazo y sea por tanto sostenible.
Mejora continua e investigación
Que duda cabe que el mundo va cada vez más rápido y por tanto las organizaciones deben aprender a vivir con cambios de manera prácticamente constante. Esta necesidad de “estar al día” se traduce en un proceso de mejora continua que las organizaciones deben interiorizar. Un plan de PRL puede dejar de ser válido en pocas semanas si se introducen cambios o si éstos pueden introducirse porque existe la posibilidad de hacerlo.
Los estudios para investigar diferentes enfoques para integrar la seguridad y salud en el trabajo en la gestión, así como el analizar y desarrollar herramientas que permitan medir los beneficios que supone la implementación de cualquier medida que se tome en el ámbito de la PRL, deben formar parte de las acciones a llevar a cabo para conseguir una prevención sostenible.
Teniendo en cuenta el valor innegable del recurso humano para el funcionamiento de cualquier organización, no cabe duda de que la seguridad y salud en el trabajo será cada vez más un aspecto clave igual de relevante que la conservación del medio ambiente para conseguir que una organización sea sostenible.