18/11/2024
El reto de la prevención en mujeres trabajadoras: Adaptación y riesgos específicos
La igualdad de género en el ámbito laboral sigue siendo un tema complejo en especial en lo que se refiere a riesgos específicos que requieren atención específica y es que las mujeres trabajadoras no solo enfrentan los mismos riesgos que sus colegas hombres, sino que también están expuestas a riesgos específicos que requieren atención y adaptación en las políticas de prevención.
Actualmente, el plan de igualdad es obligatorio para las empresas que cuentan con 50 o más personas trabajadoras, cuando se establezca tal obligación por el convenio colectivo aplicable o cuando la autoridad laboral hubiera acordado en un procedimiento sancionador la sustitución de las sanciones accesorias por la elaboración y aplicación de dicho plan. A pesar de ello, en España, existe un gran número de empresas con menos de 50 trabajadores que, aunque no tengan una obligación formal de tener un plan de igualdad deberían implementar políticas de prevención de riesgos laborales adaptadas a las características específicas de las trabajadoras, para garantizar su salud, bienestar y seguridad en el entorno laboral.
En este artículo abordamos cuáles son esos riesgos específicos para las mujeres trabajadoras y que deben abordarse de manera específica:
Riesgos Ergonómicos
Las mujeres suelen tener una mayor predisposición a lesiones musculoesqueléticas debido a diferencias biológicas y a la carga física que pueden enfrentar en ciertas ocupaciones. Este aspecto debe ser tenido en cuenta a la hora de implementar programas de ergonomía que consideren las características físicas de las mujeres trabajadoras.
Riesgos Psicosociales
Las mujeres se enfrentan a unos mayores riesgos psicosociales que los hombres. Es una realidad que son las mujeres quienes suelen experimentar en mayor medida situaciones de acoso, discriminación y desigualdad en el lugar de trabajo. Estos factores acaban afectando tanto en la salud mental y emocional, como en su rendimiento laboral. Por lo que cualquier organización que pretenda ser un lugar de trabajo seguro y respetuoso debe prestar especial atención en prevenir estos riesgos.
Salud Reproductiva
La salud reproductiva es un área que suele pasarse por alto en las políticas de prevención de riesgos laborales. La exposición a sustancias tóxicas, factores psicosociales, trabajo físico intenso o condiciones de trabajo irregulares pueden afectar a la salud reproductiva de las mujeres.
Conciliación entre la Vida Laboral y Personal
La falta de políticas de conciliación sigue siendo el talón de Aquiles, especialmente para las mujeres que suelen ser quienes asumen la mayor parte de las responsabilidades domésticas lo que en combinación con el trabajo las hace más vulnerables a la hora de tener altos niveles de estrés y agotamiento, que acaban afectando a la salud física y mental.
Prevención y Adaptación
Evaluación de Riesgos Específicos
Para garantizar la igualdad toda empresa debe llevar a cabo una evaluación de riesgos laborales con enfoque de género que permita identificar, analizando para ello las tareas que se llevan a cabo y las condiciones de trabajo, riesgos que afecten de manera específica o en mayor medida a las mujeres trabajadoras.
Formación y Concienciación
Formar en aquellos aspectos que repercuten de manera específica en la salud laboral femenina es prioritario cuando se pretende alcanzar la igualdad en materia de salud laboral. Todos los empleados de la organización deben ser conscientes de aquellos aspectos que de manera específica afectan al colectivo femenino. El personal masculino porque debe tener conocimiento de ello y el femenino para que sepan cómo abordar estos riesgos y puedan reconocer situaciones de riesgo.
Políticas de Conciliación Laboral-Familiar
Cualquier medida (horarios flexibles, teletrabajo, etc..) que pueda favorecer una mejor conciliación tendrá un efecto positivo en cualquier empleado y de manera específica entre aquellas mujeres que asumen una mayor carga de responsabilidades familiares.
Conclusiones
El reto de la prevención en mujeres trabajadoras es un tema que requiere destinar esfuerzos a adaptar las políticas de prevención de riesgos laborales para incluir las necesidades y realidades específicas de las mujeres. El hacerlo no solo protegerá a las mujeres trabajadoras, sino que además se trata de una apuesta ética e inteligente para cualquier organización que quiera crecer y mejorar en el entorno empresarial.
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