09/05/2022
Relaciones interpersonales: Estrés y violencia en el lugar de trabajo
Habitualmente las relaciones interpersonales en el lugar de trabajo suponen un impacto positivo tanto para el empleado como para la organización. Sin embargo, las relaciones interpersonales pueden ser de muchos tipos (amistosas, cooperativas, competitivas, de influencia, etc..) y también relaciones hostiles. Estas últimas son una fuente de riesgo que favorece situaciones de estrés y violencia en el lugar de trabajo.
Diferentes estudios apuntan a que cerca del 30% de los empleados de países desarrollados sufren estrés relacionado con el trabajo. En países no desarrollados se estima que el porcentaje puede ser aún mayor.
Del mismo modo que sucede con el estrés, la exposición a cualquier forma de violencia en el trabajo tiene efectos negativos, implicaciones para las personas, las organizaciones y la sociedad en su conjunto.
- Para los trabajadores supone:
. Problemas tanto de salud física y mental. A largo plazo, incluso, pueden darse efectos traumáticos.
. Efecto “contagio”: Cuando en una organización se observan signos constantes de estrés y/o diferentes actitudes que pueden considerarse violentas*, se suele generar un “clima de miedo” que acaba afectando a más empleados.
. Impacto negativo en satisfacción laboral y en el grado de compromiso con la empresa.
- Para la empresa supone:
. Aumento de problemas de salud de los empleados. Esto se traduce en mayores tasas de ausentismo, rotación y una productividad más baja.
- Para la sociedad en general:
Para la sociedad, el estrés y la violencia conducen a una mayor presión sobre los servicios y bienestar, particularmente en aquellos casos en que las víctimas se vuelven desempleados o presentan graves problemas de salud.
Además, no debemos olvidar la relación entre trabajo y vida personal. Ciertos factores de fuera del trabajo como relaciones personales y familiares influirán en situaciones estresantes y/o violentas y viceversa-
¿Cómo evitar que el estrés y la violencia estén presentes en una organización?
Diferentes investigaciones demuestran que es posible contrarrestar los problemas de estrés y violencia en el lugar de trabajo. Cuando esto se consigue hay un ahorro de coste significativo para el individuo, la organización y para la sociedad en general.
El primer paso es reconocer qué conductas deben considerarse violencia en el lugar de trabajo:
Por ejemplo, el hecho de que las cifras que se publican sobre violencia en el lugar de trabajo sean inferiores en los países del Sur de Europa y en concreto en España se debe fundamentalmente a un problema de terminología y definición del problema.
Además, las distintas formas de acoso pueden interrelacionarse y solaparse, creando dificultades para distinguir unas de otras.
Por ello es importante conocer la definición de todas aquellas conductas que suponen un ataque contra la integridad de la persona y que son principalmente:
. Acoso moral
De acuerdo con la Agencia Europea de Seguridad y Salud en el Trabajo, el acoso moral en el lugar de trabajo es un comportamiento irracional repetido con respecto a un empleado o a un grupo de empleados, que constituye un riesgo para la salud y la seguridad.
En esta definición cabe matizar que por «comportamiento irracional» se entiende que una persona razonable consideraría ese comportamiento como discriminatorio y que humilla, debilita o amenaza al empleado que lo sufre.
. Mobbing:
Podríamos decir que es una subcategoría del acoso moral. Es decir, el mobbing es un conjunto de acciones que se dan en el lugar de trabajo de forma sistemática hacia un individuo o un grupo de personas (acoso moral) con el fin de que acaben abandonando a la empresa.
En ambos casos, abuso moral o mobbing, se distinguen cinco objetivos diferentes por parte del acosador/acosadores:
. Evitar que la víctima se exprese (anularla)
. Aislar a la víctima
. Desacreditar a la víctima entre sus compañeros de trabajo o en los trabajos que desempeña pudiendo ser con el objetivo de «destruir» al «empujar» al acosado a que deje la empresa
. Poner en peligro la salud de la víctima.
. Acoso sexual:
El acoso sexual, es cualquier comportamiento de carácter sexual que es contrario a la voluntad de una persona y que atenta contra su dignidad. Habitualmente va vinculado a una relación desigual de poder.
La línea de límite entre qué se considera acoso sexual no siempre es la misma para ambas partes.
Chistes con connotaciones sexuales, sugerencias verbales, guiños, abrazos, pellizcos, proposiciones indecentes y relaciones sexuales impuestas por la fuerza forman parte de las señales que alertan de una situación de acoso sexual.
. Discriminación:
Se considera discriminación laboral toda distinción, exclusión o preferencia de trato que se dé en el lugar de trabajo basada en un criterio de raza, sexo, religión, sindicación, estilo de vida, idioma, posición social, opinión política, discapacidad física mental o psicológica o cualquier otro motivo de discriminación que se considere irracional o injustificado.
A partir de este reconocimiento de las situaciones de violencia en el trabajo, la prevención pasa necesariamente por
. Contar con programas adecuados de incorporación al puesto de trabajo, facilitando la integración de nuevos empleados.
. Fomentar el trabajo en equipo
. Fomentar acciones dirigidas a reducir la competitividad entre compañeros
. Incentivar la comunicación en todos los niveles. Una buena comunicación es clave para evitar malentendidos dentro de la organización y detectar a tiempo los primeros síntomas de una situación de acoso.
. Fomentar un ambiente de trabajo agradable lo que implica tener en cuenta otros muchos aspectos como por ejemplo el nivel de estrés, la carga de trabajo, la designación de las tareas a realizar por parte de cada empleado, etc…
…. en definitiva, poner las máximas barreras posibles para evitar los roces que puedan producirse en el día a día en el lugar de trabajo.